s.XX - Últimas tendencias - Antonio Lorente Solano: Poética del quebranto, 2003
(donde la escritura no es sutura)
Hay que dejar de escribir. El mejor poema es el que no se escribe. El mejor poema es no tener que escribir. El mejor poema es no saber qué es, cómo pasta, dónde duele la escritura. El mejor poema es la carencia de alfabeto, la incapacidad permanente para la mentira, para la translación del sentido (¿el Sentido?), para el engaño de los sentidos.
Esa es la daga. Y es en esa daga donde reposa, vigilante, seco, el gran fantasma de la escritura, esa impostura que consuela y desconsuela rasgando/rasgueando, que desplaza –rajándolo- el objeto. Que lo enajena, de nuestro estómago al papel o la piedra –como una inscripción a golpes en un mármol griego-, para reposar, ya muerto, como bajo un árbol sin sombra, que no cobija, que no acompaña.
Así la escritura, como el llanto
(Misera me! Sollievo a me non resta
altro qu’ il pianto,
ed il pianto è delitto
Alfieri)
es un delito de lesa traición, de traición a la traición.
De traición al árbol, a la ventana, a la memoria, a la mirada, a los ojos del gato en el recoveco de la escalera. Porque ¿dónde los ojos, dónde el gato, dónde la escalera, dónde el recoveco?
Porque en la escritura no. Allí una mano sin dedos dibuja, rasga, rasguea, raja. Unos dedos sin mano que ya no son lo que decimos, ni lo que decimos de ellos, ni siquiera el nombre que de ellos nos damos, el nombre/hombre que nos damos al escribir de ellos.
Allí no. Y por eso hay que dejar de escribir. Porque los héroes siempre caen ante el mismo enemigo: el castillo vacío.
Que no nos vele la palabra, que no reclame el temblor sus adjetivos.
Datos Bio-bibliográficos
Antonio Lorente Solano
(Murcia, España, 1963)
Bibliografía escogida:
Como limón seco, Libertarias, Madrid, 1992.
Quebranto, Aladeriva, , Murcia, 2003.
Enlaces:
Página personal
Sobre su obra
Poemas
Poemas
Menú
Publicidad